viernes, 6 de enero de 2012

TRIP TO FLORIDA: DAY 5
















Quinto día, y Univeral Studios again. Pero esta vez no a lo que es propiamente Univeral Studios sino a Island of Adventures, que está muchísimo mejor que Universal Studios (y eso que Universal me gustó mucho).
Y, ¿por qué está muchísimo mejor? Bueno, tiene Hogwarts y Hogsmeade tal cual. El decorado, conseguidísimo: las casas de Hogsmeade con nieve en el tejado, la tienda de artículos de broma de Zonko, la tienda de chuches con ranas de chocolate y gominolas de cualquier sabor, la taberna de las tres escobas, Olivander's, puesto de cerveza de mantequilla (que estaba riquísima) y por supuesto, el castillo de Hogwarts. Y después de dos horas de cola (si, dos horas enteritas) entramos en el castillo de Hogwarts, pasando por el despacho de Dumbledore, la clase de Defensa contra las Artes Oscuras y los pasillos con pinturas que hablaban, para llegar a la atracción que consistía en un viaje en un vehículo llevado por magia con el que sobrevolabas Hogwarts, y el bosque con todas las arañas, y el campo de quidditch y los dementores y también escapabas de un dragón. La atracción mezclaba pantalla con escenario real, con lo que casi me muero con las arañas del decorado, era gigantescas y estaban muy cerca de los asientos, demasiado cerca diría yo.
Después de la atracción, fuimos a la mini montaña rusa del hipogrifo que era para niños y después a la que se llamaba el Dragon Challengue que era una montaña rusa con muchísimo loops y giros (yo aún no me creo que hubiera subido ahí), pero me encantó.
Al acabar nuestra visita a la zona de Harry Potter, fuimos a la zona Simbad el Marino para comer y ver un show un poco cutre (todo hay que decirle) sobre el Templo de Poseidón, en el que te metías y recorrías varias salas como en una "aventura" y luego aparecían Poseidón y otro dios a luchar. La verdad es que podía haber prescindido de esa atracción.
Y más tarde, nos volvimos niñas otra vez mi "hermana" y yo, en la parte de "The cat in the hat", que es una serie de dibujos animados propia de la infancia de cualquier niño americano, y la verdad me chifló porque parece todo como salido de Willie Wonka, con muchos colores y formas que recuerdan a pasteles.
Esto fue básicamente un aperitivo antes de lo grande: la montaña rusa de Hulk. Eso sí que es una montaña rusa. Loops, giros, bastante altura, y dolor de cabeza porque mientras vas en la montaña rusa, tu cabeza no para quieta, y se va dando cabezazos contra el asiento, lo cual te deja la cabeza como un bombo. Pero merece totalmente la pena. Yo la verdad cuando la vi en el mapa, pensé que jamás de los jamases me atrevería a eso, pero lo hice, y me lo pasé pipa.
Luego, siguiendo la ciudad de los superhéroes de Marvel, fuimos a la atracción de Spiderman que es como la  de Harry Potter,mezclando pantallas y decorado, pero esta ven 3D, lo que te da mayor sensación de estar en la película.
Y como tanta emoción tampoco es buena, tocaba visita a la isla de los comics, donde se encontraba Popeye (que ahora entiendo el significado de su nombre), Krazy Kat, Betty Boop y muchos más personajes de las viñetas antiguas de los periódicos americanos.
Y vuelta otra vez a Hogwarts para tiendas y una vuelta más en el Dragon Challenge de noche, que la verdad, no presta tanto, porque no ves nada (no había casi luces).
La verdad fue un día largo y lleno de emociones fuertes, pero me lo pasé genial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario